YO Y LA MOTIVACIÓN II

"La clave del éxito es..."

Siendo realistas, nunca llegaré a conocer la clave del éxito. Y si, por algún casual, consigo tener éxito, tampoco sabré lo que me hizo llegar hasta él. Además, soy de los que piensa que conocer la clave del éxito sería como conocer el final de una película que has visto o, como diría si fuera "hipster", "spoilearme". Si bien es cierto que no me gusta descubrirla, pero si creo que hay algo necesario y que, tal vez, esté cerca de esa misteriosa clave del éxito, es aprender de los errores. Fallar por fallar, no. Fallar para aprender, sí. El problema llega cuando has fallado y no sabes qué hacer después o incluso cuando ni siquiera has fallado pero no sabes cómo actuar frente a los retos que te propones. Para saber responder de la mejor manera posible necesitamos de ella. Y no, no me refiero a la clave del éxito cuando digo ella, sino a la

MOTIVACIÓN.

"Si consigues saber motivarte, conseguirás lo que te propones y más"

Por suerte o por desgracia, no viví la época del Che, ni de Hitler para poder preguntarles cómo hicieron para convertirse en líderes de movimientos que consiguieron arrastrar a grandes masas. No me refiero al hecho de asesinar a gente porque eso no sería capaz de entenderlo ni aunque me lo explicasen ellos mismo. Me refiero a la capacidad que tuvieron para conseguir aquello que se propusieron. Obviamente, sus propósitos no se asemejan en nada a los míos, pero sí que pueden tener un cierto parecido. Fueron capaces de alzarse con el poder, de convertirse en ejemplos a seguir de muchos. Y ahí es donde se encuentra nuestro único punto en común, el de llegar a la cima. En su caso, a la cima del poder cubano y alemán, respectivamente. En mi caso, a la cima de mis objetivos, los cuales durante estas fechas serán solo académicos. Para ello, necesitaré otra vez de ella, la MOTIVACIÓN.

"7 mil millones de personas, 7 mil millones de iguales"

Nunca he sido de dar consejos, ni creo que vaya a comenzar ahora. Pero si hubiera una frase que pudiera decir a cada uno de los humanos que pisan este suelo llamado Tierra sería: "Si yo puedo, tú puedes." Puede parecer un consejo ególatra, pero no podía ser de otra manera viniendo de quien viene. Pongo, cómo no, el "yo" por delante porque creo que es la mejor manera de motivar a la persona que das este consejo. Empezar por un "yo" y acabar por un "tú puedes". También pienso que si tuviera que definir mi forma de pensar con una frase sería igualmente ésta porque soy de los que cree que todos somos iguales, todos tenemos la misma capacidad para conseguir lo que nos proponemos. Trato de respetar el resto de formas de pensar, pero lo cierto es que no entiendo cómo puede haber gente que crea que existe mejores y peores; y peor todavía aquellos que se consideran por encima de los demás. Personas que subestiman al resto pensando que son inferiores. Para mí, se equivoca por completo pensando de esa manera, ya que todos somos capaces de conseguir lo que nos proponemos porque si nos lo proponemos es porque pensamos que tenemos capacidad para ello y, sobre todo, si hay algo que tengo claro es que nunca habrá mejores ni peores, sino iguales.

"Estudiar con el libro de la asignatura de motivación por delante"

Estoy seguro de que no seré el único que, en estos días, vaya a depender de un trozo de folio y unas cuestiones enumeradas. Es más, seguro que muchos de ellos se enfrentarán a trozos de folios mucho más difíciles que los míos, pero sea como sea, ambos deberíamos tener algo en común, la MOTIVACIÓN. Pensar en la de personas que anteriormente se enfrentaron a los mismo retos que nosotros y fueron capaces de superarlos. Sin embargo, esa MOTIVACIÓN no deber ser excesiva, sino moderada. En una carrera, pensar en el final solo te hace agobiarte aun más. Pienso que lo correcto sería dividir la carrera para que, aunque hubiera más "metas", éstas estuvieran más cerca de ti. De este modo, no verías la verdadera "meta" del final del camino tan lejas. Aunque para conseguir lo que ahora me propongo necesitaré de ella. Y esta vez no, no me refiero a la MOTIVACIÓN, sino a la mano para poder escribir.

"Porque cuando llegas a la meta te ofrecen una botella de agua.

En mi caso, mi botella de agua es el verano."

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SOBRE EL AUTOR

Este mundo de hoy va demasiado deprisa: quieren conocerme cuando no lo he hecho ni yo todavía.